Llegar y besar el santo. A punto ha estado de ser así la primera experiencia de Jon Rahm en el mítico recorrido londinense de Wentworth, escenario de múltiples proezas de su admirado Seve Ballesteros, así como de otros jugadores españoles como José María Olazábal, Miguel Ángel Jiménez o Nacho Garrido.

Rahm no ha podido ganar esta semana el BMW PGA Championship en su debut, pero se ha quedado a las puertas. Concretamente, ha finalizado segundo después de una preciosa batalla sin cuartel en la última jornada frente a Danny Willett. Jon han rubricado cuatro vueltas de 66, 67, 68 y 70 golpes, todas bajo par, y ha finalizado con un acumulado de -17. Sólo un extraordinario Willett ha podido evitar su triunfo en su primera presencia en Virginia Water.

Jon ha desplegado un golf de alta escuela durante toda la semana. Apenas ha notado el parón de tres semanas que se tomó tras la final de la FedEx Cup. Más bien al contrario, se le ha visto cada día fresco y muy bien engrasado. Se puso arriba desde el primer día y ahí ha aguantado hasta el último hoyo. Incluso salió al 18 con alguna opción de victoria, aunque estaba a dos golpes de Willett.

En la última jornada, Jon ha vuelto a jugar muy sólido, pero Willett se ha mostrado magistral, con una tarjeta de 67 golpes. Sea como fuere, el español se marcha de Barrika habiendo ofrecido una nueva lección desde el tee. Ha sido el segundo que más calles ha cogido y el quinto en distancia. También ha pateado a muy buen nivel y sólo le ha faltado un poco más de precisión con los hierros.

Este resultado en Wentworth le permite escalar al segundo puesto de la Race to Dubai, además le coloca ya arriba en la clasificación para la Ryder Cup. La semana que viene volveremos a tenerlo en acción en el Alfred Dunhill Links Championship.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies.

ACEPTAR
Aviso de cookies