Jon Rahm ha cumplido poco más de un año como profesional y ya puede presumir de haber jugado los cuatro Grandes. Bueno, realmente podrá presumir de ellos a partir del jueves, cuando pinche su bola por primera vez en el recorrido Quail Hollow para arrancar la primera ronda del PGA Championship. No está mal el logro para el joven jugador de Barrika.
Un buen dato que refleja lo difícil que es y el valor que tiene lo que está haciendo Rahm es que apenas ocho españoles antes que él habían jugado ya los cuatro Grandes en toda la historia. Él lo ha conseguido en apenas catorce meses. El logro es mayúsculo.
Sin embargo, si por algo se caracteriza el Número 6 del mundo es que no le vale sólo con participar, que está muy bien, sino que su objetivo siempre es ganar, o al menos quedar lo más arriba posible cada semana que compite. Y eso es lo que va a intentar esta semana en Charlotte.
Rahm ya ha jugado este año el recorrido de Quail Hollow, aunque las condiciones de esta semana son bastante distintas. Ha llovido mucho y el campo está pesado y largo, aunque el tiempo parece que dará una tregua y es posible que no llueva ni hoy ni mañana, lo que sería una gran noticia, sobre todo para pelear contra el complicadísimo rough de bermuda del campo de Carolina del Norte.
Rahm llega en un momento muy bueno al torneo. Viene de completar una fantástica semana desde el tee en el WGC Bridgestone Invitational y sólo necesita afinar algo más con los hierros, especialmente los cortos, de 140 metros hacia abajo, para estar en perfecto estado de revista. Seguro que lo ha trabajado duro en estos días y se verán los resultados en el PGA.
Mientras, lo más importante volverá a ser el trabajo mental. Rahm está haciendo un esfuerzo por intentar considerar esta semana como una más, sin concederle más importancia de la que obviamente ya tiene. No es fácil. Controlar ese ansia por hacerlo bien en las grandes citas será sin duda una de las claves para estar arriba con los mejores.
Rahm saldrá a jugar este jueves a partir de las 13.35, hora local (seis horas más en la España peninsular), junto a Rory McIlroy y Rickie Fowler. Otro partidazo para el sensacional golfista de Barrika.